A 30 km de Lisboa: Sintra, "La ciudad del bosque"

Sintra es una ciudad de origen celta que está construida dentro de un bosque. Caracteriza a la región el paisaje verde, la tranquilidad y su suave clima, motivos que llevaron a la familia real a construir dos Palacios reales en la zona. Por la importancia de su patrimonio histórico, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, en 1995.

Callejear por Sintra es todo un placer para los sentidos pero no para los pies, ya que todas las calles están en cuesta. En el centro histórico, lo mejor que podemos hacer es investigar entre tantos locales llamativos y pastelerías dónde degustar dulces típicos de Sintra como la Queijada muy parecidos a los pasteis de Belem y los traveseiros de Sintra, unos pastelitos de hojaldre y yema de huevo.

Para comer y tomar algo: En cuanto a restauración, disfruta de un buffet de calidad por poco dinero en Xentra Restaurant o Apeadeiro y un café y dulces típicos en el famoso Cafe A Piriquita.

Como moverte por la ciudad: Para llegar a los lugares más interesantes,puedes utilizar tu coche, ya que están a gran distancia del centro, pero la carretera es muy estrecha y los sitios para aparcar no abundan; por eso yo te recomiendo el autobús (5€) que realiza un trayecto circular entre el centro de Sintra, la Quinta da Regaleira, el Castelo dos Mouros y el Palacio da Pena. Se puede subir y bajar del autobús en cualquiera de las paradas y las veces que quieras. Ideal para visitar los distintos monumentos.

Recomendación: Empezar la visita en el Palacio Da Pena, ya que se suelen formar largas colas y podrías quedarte sin poder entrar.

Palacio Da Pena 

(Horario: 9.45 a 19.00- Precio 14 euros)http://www.parquesdesintra.pt

Tiempo mínimo de visita: Hora y media

Se sitúa en lo alto de un risco escarpado de Sintra desde el que se domina todo el valle, dando una vista de 360 grados sobre los terrenos del valle. Está custodiado por un gran jardín de flora inaudita.

El Palacio da Pena (13,5€ adultos) conjuga multitud de estilos, todo extremo y sobre todo colorido. Sólo hay que ver la gran torre roja, los muros amarillos, las fachadas azules y las torres redondeadas, que parecen de cuento de hadas. El interior del palacio no se queda corto, con salones recargados hasta los topes con multitud de objetos. 

En cuanto al exterior, dar una vuelta por sus murallas hasta rodearlo también es algo muy recomendable. 

Unos dicen que es el sueño enajenado de un arquitecto; otros piensan que es un trozo de un cuento de hadas, pero poca gente de la que visita el Palacio da Pena se queda indiferente. En el siglo XIX fue residencia de la Familia Real portuguesa y constituye un hito del estilo romántico decimonónico.

Cuando se proclamó la república de Portugal en 1910 el palacio se transformó en un museo, conservándose tal y como lo dejara la familia real.

Castelo dos Mouros 
(Horario: 9.30 a 20.00-Precio 7 euros)www.parquesdesintra.pt

Tiempo mínimo de visita: Una hora

Es la fortificación más antigua de la zona. Construido entre el siglo VIII y IX por los árabes durante su conquista de la Península Ibérica, se conserva en bastante buen estado. Incluso la gran cisterna donde guardar agua ante los asedios se mantiene intacta. Desde lo alto de alguna de sus cinco torres tenemos unas de las mejores vistas de Sintra, y si el día está despejado, veremos el océano Atlántico e incluso Lisboa.

Aunque sea posible ver el castillo en menos de una hora, su imponente estilo alejado de cualquier floritura, y el largo paseo sobre sus murallas, hace que sea más que recomendable visitarlo, a pesar de su alto precio. La sinuosa planta del Castelo dos Mouros, cuyos muros se adaptan perfectamente al escarpado terreno, nos permitirá obtener grandes fotografías. Como curiosidad, las banderas de las torres representan los distintos escudos que tuvo Portugal en su historia. La bandera verde es Sintra en caracteres árabes.

Quinta da Regaleira 

(Horario: 9.30 a 20.00-Precio 7  euros) http://www.regaleira.pt/

Tiempo mínimo de visita: Tres horas

Tras cruzar la taquilla seguro que iremos directamente al pequeño Palacio de la Regaleira, cuyas salas se encuentran perfectamente decoradas y conservadas. Lobos de tesela en el suelo, escenas bucólicas pintadas en las paredes, conejos con alas, tacitas de fina porcelana francesa, escaleras con barandillas imposibles, canguros custodiando las almenas, todo en este palacio es de lo más extraño. Eso sí, las vistas desde la terraza superior son magníficas, así como los múltiples detalles del palacio.


Pero lo alucinante es el tamaño de los jardines ¡el palacio apenas cubre una pequeña esquina del gran mapa!
Así que, sin tiempo que perder, empezar la visita de este extenso jardín en el que se refleja la forma de ver el mundo y el cosmos según Carvalho Monteiro. Más de 12 años tardó el arquitecto Luigi Manini en materializar en esta vasta extensión el interés de Monteiro por el glorioso pasado de Portugal y la época de los grandes descubrimientos, los simbolismos esotéricos de la alquimia, la masonería, la Rosacruz y los templarios.
Colocó multitud de simbología por todo el jardín y creó pequeñas torres y fortalezas interconectadas entre sí. De ahí que nos encontremos con letras de molde en el suelo, azulejos representando diferentes cruces, figuras de animales mitológicos, y un largo etc. Llegar al Pozo Iniciático, en lo alto del jardín (la parte más salvaje), nos muestra hasta qué punto tenían todo estudiado. Los escalones y rellanos de este pozo que se interna 27 metros dentro de la tierra  y los 23 nichos encontrados bajo los peldaños no hacen sino aumentar el misterio de este peculiar pozo.

Todo en este jardín es asombroso, y eso que todavía no me he puesto a hablar de los túneles subterráneos que conectan las distintas construcciones, de la cueva a la que se accede saltando sobre piedras flotantes. 

Y es que 3 horas no son suficientes para conocer este inmenso jardín, que por sí sólo es razón suficiente para visitar Sintra. 

Tranquilamente podemos pasarnos toda la tarde en la Quinta de la Regaleira, y seguiremos queriendo más tiempo para explorar sus rincones.

Palacio Nacional de Sintra 

(Horario: 9.30 a 19.00-Precio 9  euros)

Tiempo mínimo de visita: 1 hora

Uno de las visitas imprescindibles es el Palacio Nacional de Sintra, el más importante de la ciudad y ejemplo de palacio medieval portugués.Las dos blancas chimeneas cónicas de 33 metros de altura, que corresponden a la cocina del palacio, son el símbolo de la ciudad.

Su mezcla de estilos, combinando el gótico y manuelino con influencias mudéjares, llega a rozar lo hortera en alguna de las salas, aunque las combinaciones salen airosas al verlo en su totalidad. Hay estancias que están decoradas completamente según su nombre. De ahí que la sala de los cisnes tenga todo su techo recubierto con estos animales, o que en la del maíz dé ganas de darle un mordisco a los coloridos azulejos.La influencia árabe se nota en todo el Palacio Nacional de Sintra, habiendo incluso una habitación con su propia fuente mudéjar, al más puro estilo Alhambra de Granada. La Sala de los escudos (Sala dos Brasões) es posiblemente la más espectacular del palacio, con su alto techo abovedado en el que hay tallados 72 escudos de armas de familias nobles. 

Personalmente he puesto las visitas que me parecen más interesantes y en orden de importancia.
Pero, no me iria de Sintra sin ver las tres primeras.

 ¡ TE QUEDARAS MARAVILLADO¡